Los soldados y las mujeres
Somos testigos de la resurrecciòn
Evangelio de hoy Mt 28,1-15
1 Pasado el sábado, al alborear el primer día de la semana, María Magdalena y la otra María fueron a ver el sepulcro.
2 De pronto se produjo un gran terremoto, pues un ángel del Señor bajó del cielo y, acercándose, hizo rodar la piedra y se sentó encima de ella.
3 Su aspecto era como el relámpago y su vestido blanco como la nieve.
4 Los guardias, atemorizados ante él, se pusieron a temblar y se quedaron como muertos.
5 El ángel se dirigió a las mujeres y les dijo: ‘Vosotras no temáis, pues sé que buscáis a Jesús, el Crucificado;
6 no está aquí, ha resucitado, como lo había dicho. Venid, ved el lugar donde estaba.
7 Y ahora id enseguida a decir a sus discípulos: ‘Ha resucitado de entre los muertos e irá delante de vosotros a Galilea; allí le veréis.’ Ya os lo he dicho.’
8 Ellas partieron a toda prisa del sepulcro, con miedo y gran gozo, y corrieron a dar la noticia a sus discípulos.
9 En esto, Jesús les salió al encuentro y les dijo: ‘¡Salve!’ Y ellas, acercándose, se asieron de sus pies y le adoraron.
10 Entonces les dice Jesús: ‘No temáis. Id, avisad a mis hermanos que vayan a Galilea; allí me verán.’
11 Mientras ellas iban, algunos de la guardia fueron a la ciudad a contar a los sumos sacerdotes todo lo que había pasado.
12 Éstos, reunidos con los ancianos, celebraron consejo y dieron una buena suma de dinero a los soldados,
13 advirtiéndoles: ‘Decid: ‘Sus discípulos vinieron de noche y lo robaron mientras nosotros dormíamos.’
14 Y si la cosa llega a oídos del procurador, nosotros le convenceremos y os evitaremos complicaciones.’
15 Ellos tomaron el dinero y procedieron según las instrucciones recibidas. Y se corrió esa versión entre los judíos, hasta el día de hoy.
—Biblia de Jerusalem 3-Edicion—
| Aspecto | Las mujeres (María de Magdala y compañeras) | Los soldados |
|---|---|---|
| Contexto inmediato | Salieron “de prisa”, movidas por temor y “gran alegría” (v. 8) | Llegaron a Jerusalén tras el acontecimiento de la resurrección |
| Reacción emocional | ● las mujeres: temor mezclado con alegría (v. 8) | |
| ● Las mujeres: asombro y adoración (v. 9‑10) | ● los soldados: miedo (implícito en v. 4: “quedaron como muertos”) | |
| ● Los soldados: preocupación por su carrera (v. 12‑14) | ||
| Comportamiento | ● las mujere: corren a anunciar la buena noticia (v. 8, 10) | |
| ● mientras las mujeres se postran, abrazan los pies de Jesús y lo adoran (v. 9) | ● los soldados: huyen espantados ante el ángel (v. 4) | |
| ● los soldados aceptan el soborno y difunden la mentira (v. 12‑15) | ||
| Mensaje transmitido | “Id y anunciad a mis hermanos…” (v. 10) –es una voz de esperanza y misión | “Sus discípulos vinieron de noche y lo robaron…” (v. 13) es una voz de engaño |
| Motivación profunda | Fe en la palabra del ángel y en el encuentro con el Resucitado | Oportunismo: proteger su posición y obedecer a las autoridades |
| Resultado teológico | Inicio oficial del anuncio pascual; primeras “predicadoras” | Primer episodio de falso testimonio sobre el sepulcro vacío; difusión de la difamación |
Reflexiòn final
Nos centramos en tres puntos importantes que pienso nos puede iluminar nuestra vida espiritual en este camino de pascua
Fe vs. Miedo
- — Las mujeres, aunque atemorizadas, acogen el mensaje y al encontrarse con el Resucitado convierten su temor en alegría y misión.
- — Los soldados reaccionan con pavor y, movidos por interés propio, eligen la mentira para protegerse.
Testimonio auténtico vs. testimonio corrupto
- — Las mujeres son las primeras testigos de la resurrección, compartiendo lo que han visto y oído.
- — Los soldados alimentan un “rumor” difamatorio, tratando de ocultar la verdad.
Llamado a la misión
- — Jesús confía a las mujeres el mandato apostólico: “Anunciad a mis hermanos…” (v. 10), otorgándoles un papel clave en el inicio de la Iglesia.
- — Los soldados quedan envueltos en la sombra de una mentira que perdura “hasta hoy” (v. 15).
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